Entrevista a la Lic. Noelia Gurmendi
“Resulta imprescindible indagar el mercado de trabajo”
Santiago del Estero cuenta con una vasta historia en cuanto a investigaciones, desde los Hermanos Wagner hasta Canal Feijoó, pasando en la actualidad por investigadores como Alberto Tasso. En cuanto al mercado de trabajo, las investigaciones de Floreal Forni, Carlos Zurita, Carlos Díaz y María Emilia Isorni, sentaron en gran parte las bases a nivel local de teorías sustantivas, que coadyuvaron al desarrollo de nuevas indagaciones científicas como las de la licenciada en Sociología, Noelia Gurmendi, quien es becaria doctoral CONICET e investigadora del Centro de Estudios de Demografía y Población (CEDEP) de la Facultad de Humanidades, Ciencias Sociales y de la Salud (FHCSyS).
“El investigador y la labor intelectual en los tiempos que corren, tienen la desafiante tarea de ponerse al servicio de la comunidad”, expresó la investigadora quien cuenta en esta entrevista, todo sobre sus trabajos sobre mercado de trabajo en Santiago del Estero.
- ¿Cómo comienza tu inquietud por la investigación?
Hace un poco más de 7 años, mientras cursaba los últimos años de mi carrera de Licenciatura en Sociología, me encontré con docentes que me invitaron a participar del CEDEP. Allí, encontré un entramado de investigaciones sociales, demográficas y económicas en desarrollo, que despertaron inquietudes y preguntas a nivel personal.
A partir de varias lecturas y referencias empíricas, comencé por definir el camino de investigación que desarrollaría.
-¿Sobre qué aspectos profundizan tus investigaciones?
Son problemáticas de conocimiento vinculadas al mercado de trabajo santiagueño desde diversas aristas y bajo diferentes categorías de análisis, pero siempre centrándome en un eje medular: La segmentación y desigualdad del mercado de trabajo santiagueño de la última década.
Resulta imprescindible indagar el mercado de trabajo, en el marco de una provincia donde se concentran referencias de un histórico rezago social y productivo, lo que incide de manera directa en la construcción de una estructura del empleo con marcadas particularidades, como por ejemplo, fuerte concentración de la ocupación a nivel rural en actividades de subsistencia, gran relevancia del trabajo por cuenta propia, baja asalarización de la fuerza de trabajo, sobreempleo público y un escaso desarrollo a nivel industrial.
Estos son indicios de una considerable segmentación del mercado de trabajo básicamente en términos diferenciales de ingreso, productividad y niveles de ocupación que por supuesto conllevan a generar grandes diferencias en el funcionamiento del empleo.
- ¿Cómo se caracteriza el mercado de trabajo a nivel provincial?
Desde el proceso de investigación que aún sigo indagando, considero que el mercado de trabajo en la provincia se caracteriza por una fuerte concentración de la fuerza de trabajo en el sector servicios. Se percibe una progresiva y clara tendencia a la precarización e informalidad del empleo, más significativo en el sector agropecuario e industrial a lo largo del periodo en estudio, donde se replica el mismo comportamiento el sector servicios a partir del año2004.
Esta situación tiene una marcada propensión de alza en la etapa de la post-convertibilidad, demostrando que no siempre se da la relación virtuosa entre crecimiento económico, generación y calidad del empleo. También quisiera resaltar que la estructura del empleo provincial, conserva características muy similares a lo que acontece tanto a nivel nacional como global, referido al hecho de que el sector servicios tiene mayor preponderancia. Sin embargo el paso de una sociedad industrial a una posindustrial en los países desarrollados, responde al hecho de que, en la medida que la sociedad se vuelve más desarrollada comienza a demandar servicios especializados que crecen en difusión y sofisticación con la riqueza de la sociedad, por lo tanto el sector se manifiesta eficiente y altamente productivo. En cambio, Santiago del Estero constituye una región marginal del capitalismo periférico, con una matriz productiva incapaz de sostener el aumento de la oferta de trabajo, dado que la industria no logró desarrollarse, desembocando en una transición degenerativa, de un sector tradicional agrario de tipo lewisiano a un sector terciario de subsistencia.
- ¿De qué trató tu tesis de grado?
Consistió en dar una explicación del funcionamiento del empleo formal en el sector salud de Santiago del Estero, en un período de tiempo que se caracterizó o estuvo signado por fuertes crisis institucionales, políticas, económicas y sociales, tanto a nivel nacional como provincial, las cuales considero que impactaron de manera directa en el mercado laboral de la provincia.
Los propósitos de la tesis fueron: identificar en relación a los términos de calidad laboral los tipos de contrato, categoría de empleo e ingresos que perciben los trabajadores del sector formal, asimismo, establecer el tipo de protección laboral que poseían los asalariados del sector formal, en relación a seguridad y beneficios sociales. Y por último, identificar el nivel de calificación de los asalariados del sector formal del empleo según corresponda su categoría de empleo.
La decisión de abarcar los trabajadores formales y no los informales se debió exclusivamente a la cuestión metodológica, específicamente vinculada a la accesibilidad de los datos, ya que para aquel entonces me encontraba realizando una pasantía en el Ministerio de Salud en el área de Recursos Humanos, lo que me permitía el manejo de registros que cubría este colectivo del trabajadores.
¿Y en cuanto a tu tesis doctoral?
Aún se encuentra en curso y tiene la intención de complejizar en el conocimiento del mercado de trabajo y abonar nuevas evidencias empíricas que contribuyan a dar explicaciones de la situación actual del mercado de trabajo provincial.
Lo que me propongo básicamente es describir la estructura del empleo de los 17 sectores productivos, resaltando específicamente los sectores de salud, enseñanza y administración pública.
Estoy poniendo énfasis en la productividad, categorías de empleo y remuneraciones medias al trabajo, con el fin de establecer las brechas y desigualdades que se presentan entre sectores. También se procede a caracterizar la evolución de las condiciones de trabajo tanto formales, como precarias del sector de la administración pública
Y por último, examinar los factores políticos, económicos e institucionales que incidieron en el mercado de trabajo y en la generación de políticas de empleo de los sectores en estudio.
El hecho de recortar mi estudio a 3 sectores productivos (correspondientes a los sectores estrellas de servicios/terciario) y a un recorte temporal de análisis determinado, se vincula a que en el periodo de análisis en la provincia no se produjo el despegue de la industria que permitiese el tránsito a una sociedad moderna.
Y con ellos, la tercerización forzada constituyó el derrotero de la inserción laboral, afianzándose con fuerte vigor el empleo inestable. En ese contexto, se advierte que tanto la segmentación laboral, como las desigualdades en términos de calidad de empleo indicado por la primacía de las categorías ocupacionales sin protección laboral, empleos con bajas remuneraciones y de escasa productividad se incrementaron con mayor fuerza en el mercado de trabajo de la administración pública, salud y enseñanza en la provincia que en los restantes sectores productivos, generando esta situación constantes conflictos laborales de trabajadores y que hacen evidente el problema estructural de la provincia traducido en un equilibrio de bajo nivel.
- ¿Cuál es el rol y las herramientas de un investigador en el siglo XXI?
El siglo XXI ha arrojado serios retos, para todas las áreas del conocimiento, pero creo que en especial para la investigación, considero que el investigador y la labor intelectual en los tiempos que corren, tienen la desafiante tarea de ponerse al servicio de la comunidad con la que convive y coexiste cotidianamente. Asumiendo el compromiso intelectual con los problemas que la sociedad demanda con mayor intensidad de ser visibilizados en los debates académicos.
Pienso que es preciso que el investigador/a no adopte posturas dogmáticas y mucho menos se cierre al conocimiento; que no se considere poseedor de verdades absolutas. Para ello, creo que se requiere de una apertura, donde el investigador/a asuma actitudes cognoscitivas y reflexivas que redunden en el hecho de tender puentes entre la producción de conocimiento y el mejoramiento o transformación de la realidad en estudio.
- ¿Cuán importante es la investigación científica en la sociedad?
Creo que en todas las ciencias es precisa y de gran relevancia la investigación. Los debates que se promueven en las ciencias sociales producto de la investigación, contribuyen a pensar los problemas colectivos que enfrentamos y a imaginar maneras más justas de organizar la vida social. La investigación nos brinda herramientas para comprender la sociedad en la que vivimos, quiénes somos y hacia dónde vamos. La investigación es el eslabón que permite a la sociedad a través del conocimiento científico replantear la agenda de políticas públicas y proyectar una planificación económica y social que contribuya a cambios positivos.
Tengo la convicción que sin investigación en ciencias sociales estaremos en deuda con nuestra sociedad.
- ¿Qué opina al respecto del rol de las mujeres en la investigación?
Considero que la mujer científica del siglo XXI y especialmente en América Latina, ha renovado el escenario en los ámbitos académicos, generando mayor protagonismo y conquistas en el campo intelectual. De igual manera, creo que aún persisten diferencias entre países y se hace visible la segregación vertical y horizontal que en parte sigue desfavoreciendo a las mujeres. Creo que estamos en un proceso de transición y el cambio cultural y social con respecto a la presencia de la mujer en los todos los ámbitos (no solo académicos sino en los diversos sectores del mercado de trabajo) es esperanzadora.